domingo, 8 de julio de 2012

Días de 30 horas

... y semanas de 8 días.

Seguro que aún así me faltaría el tiempo para hacer todo lo que quiero o debo hacer.

La casa, el trabajo, las obligaciones extra... Los días se me pasan volando, las semanas y los meses se van sin apenas enterarme. El tiempo se me escurre entre los dedos y siempre tengo la sensación de tener tareas pendientes y de no saber cuándo podré ocuparme de ellas. Y me paro a pensar y sé que en realidad mi vida es todavía muy fácil, que tengo tiempo para mí, pero pienso: "Si ahora me falta tiempo ¿qué haré cuando tenga un bebé a mi cargo? ¿Cómo me organizaré cuando tenga hijos? ¿Seré capaz de llevarlo todo adelante y de hacerlo todo bien?


Algunas cosas de las que tengo pendientes ahora mismo son:

 - Acabar de guardar la ropa de invierno, o por el contrarioya cuando llegue la hora de volverla a sacar aún estará sobre la cama. Menos mal que ahora no usamos esa habitación, que si no... Da miedo asomarse!!

- Elegir algunas fotos de nuestra boda, que fue hace casi 2 años, para dar a la familia y otras para ponerlas en los marcos que compramos hace meses. O me espero un poco más y las encargo junto con las de la comunión del pequeño.

- Ordenar la habitación del ordenador - trastero - almacén, que está que no puede una entrar. Algo misterioso pasa en esa habiatación que cuando por fin me dedico un día a ordenarla no tarda más de una semana en volver a estar en un estado de caos total. Estoy por desistir y asumir por fin que es un agujero negro al que va a parar todo lo que no encuentra sitio en el resto de la casa.

- Planificar un poquito mi dieta semanal y hacer ejercicio. Llevo... uff! ni me acuerdo desde cuándo llevo queriendo ponerme a dieta y diciendo que voy a salir a andar. Primero andar y después, cuando ya no me falte el aire a los 10 minutos, correr o acompañar a mi amiga V al gimnasio. Vaaale, lo admito. Aquí intervienen otros factores además de la falta de tiempo, cosas en las que no voy a entrar ahora pero que riman con pereza y chocolate.

-  Dedicar algo de tiempo a aprender a tejer. He empezado con las dos agujas y quiero también hacer algo de ganchillo. Mi suegra tiene bastante idea y suele dedicarse un ratito a ello por las tardes. Me gustaría ir con ella algunas tardes para ir aprendiendo. Otro interés que he dejado aparcado hace tiepo es el photoshop, que está ya en el fondo del baúl.

Solo somos dos en casa. Soy de las que va de casa al trabajo y del trabajo a casa, a la compra y poco más. ¿Por qué me falta el tiempo entonces? He llegado a la conclusión de que el tiempo es una de esas cosas que está en la misma categoría que el espacio en los armarios: por mucho que tengas siempre necesitas un poco más. En fin, al igual que con el espacio en los armarios, para meter más cosas habrá que acabar tirando algunas otras.

Supongo que cuando llegue el momento me organizaré de otra manera, encontraré el tiempo que ahora creo no tener y sobreviviré al igual que el resto de mamás/papás. Seguramente cuando tenga un hijo del que ocuparme cambiarán mis prioridades y mi modo de ver las cosas. A menudo oigo/leo eso de que "ya no se ve el polvo sobre los mubles o si la cocina está por recoger". No seré distinta de otras madres, me digo a mí misma, y podré con todo, aunque ahora mismo me parezcan todas superheroínas.


¿Cuál es vuestra experiencia al respecto? ¿Habéis notado mucho la falta de tiempo después de tener hijos o simplemente habéis cambiado vuestra rutina? En vuestra casa ¿sóis/son las mujeres quienes os ocupáis/se ocupan del trabajo doméstico? (Ay madre, éste tema daría para 10 entradas por lo menos).

8 comentarios:

  1. Bueno, yo no te puedo ayudar mucho con la experiencia maternal (ya me gustaría, ya...) pero estoy segura de que, llegado el momento, te organizarás estupendamente y con el famoso síndrome del nido estará todo a punto para recibir a tu pequeño. Además, para las cosas importantes de la vida siempre se saca tiempo. Me ha encantado lo del chocolate + pereza. Yo también soy de ese club ;)
    Un besito.

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    1. Sí, supongo que me las arreglaré. Seguirán quedando cosas por hacer pero imagino que no me importará tanto como ahora. Tendremos otras prioridades.
      Lo del club de la pereza y el chocolate, que no hay manera de darse de baja, oye! jejeje!

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  2. Uff... pensé que era la única que tiene sin imprimir las fotos de su boda y que se me van a pegar (en serio, de verdad ya las veo pegadas) con las del bautismo de la Nenita!!
    Algún día te organizas, no te culpes si no tienes la casa perfecta.

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    1. Jajaja, pediremos un descuento al estudio de fotografía. Un 2x1, jajaja.

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  3. Claro, ahora pides días de 30 horas... pues verás con los pekes cómo pides que el tiempo se detenga! jajaja.
    Te cuento un secreto? Yo tengo la ropa de invierno junto a la del verano... jajaja, es que lleva pendiente tantas semanas que ya digo: pa qué! si el invierno está a la vuelta de la esquina? jajaja. No, en serio, verás que lo importante es lo que llama a tu corazón..., pero como todo en esta vida, se aprende viviéndolo...

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    1. Ay Débora, por eso me preocupa cómo me las voy a arreglar después. Lo de tener la ropa de todo el año en el armario no está mal. Yo tendría que tirar la mitad de cosas porque los tengo todos a tope, pero en ralidad simpre nos ponemos lo mismo, así que tampoco sería grave ;-)

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  4. No veas como me he reído, resulta que tus tres primeras tareas yo también las tengo pendientes: organizar la ropa, las fotos de la boda (nos casamos hace 2 años y medio!!!) y ordenar la habitación del ordenador. ¿Qué tendrán las habitaciones de los ordenadores que atraen tanto desorden? Jajaja.

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    1. Síii! Justamente he estado este ffin de semana arreglando esa habitación. Ya le tengo medio arreglada, pero el problema es que la mitad de los trastos los he pasado a la otra habitación que no usamos mucho (que será en pocos meses la habitación del bebé), así que me temo que no he adelantado mucho. Ya había acabado de guardar la ropa de invierno hace unas semanas, pero dentro de nada estamos otra vez con el cambio de estación, grrrrrrr!!!

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