Hoy me he despertado
pensando en estrenar algo de la ropa premamá que me compré hace unas
pocas semanas. Ya sé que estoy comenzando mi embarazo (acabo de cumplir
las 12 semanas) y que aún puedo seguir llevando mi ropa habitual una
tempordita más. Seguramente era pronto para comprar ropa de embarazada
pero lo hice por dos motivos: uno, para aprovechar las rebajas de
invierno; dos y sobre todo... ¡porque me hacía mucha ilusión!
Cogí
un día libre y me fuí con mi madre a pasar un día de compras. Ella a
por zapatos y sus cosas y yo a por ropa premamá. La verdad es que fue
bastante decepcionante. La tienda de Prénatal a la que habíamos planeado
ir y a la que hasta entonces sólo conocíamos de pasar frente a su
escaparate había cerrado justo el día anterior por traslado. Aún se
veían dependientas trabajando dentro, embalando y desmontando
expositores. Estuvimos mirando la nueva dirección pero la verdad es que
no teníamos ni idea de por dónde quedaba y además suponía tener que
salir de la ciudad, con lo que nos había costado llegar al centro.
-"El Corte Inglés tiene seguro mucha ropa premamá, tienen mucho de todo", pensamos, pero nos equivocamos.
Apenas
hay un rincón en la planta de moda para mujer, con poco para elegir y
sobre todo feísimo, como si fuesen restos de temporadas de hace años.
Hasta a mi madre le pareció todo anticuado. Aprovechamos para echar un
vistazo a los artículos de bebé, para ir haciéndonos una idea de lo que
hay, precios, etc. Carritos, cunas, capazos, sillitas... todo un mundo!
Todo bastante caro, sobre todo pensando en el montón de cosas que se
necesitan y que habrá que comprar a la vez, pero bueno, para entonces
aún faltan unos meses. ¡Habrá que ir ahorrando!
Al
final fuimos a un centro comercial esperando encontrar algo en tiendas
como H&M o Zara. Siguiendo con mi racha de mala suerte en H&M me
dicen que en esa tienda no tenían línea de premamá, que en la tienda de
Benidorm sí tenían.
-
¡Pero qué c@*%o#! Vengo de un pueblo de al lado de Benidorm
especialmente a la ciudad esperando encontrar más variedad de tiendas y
aprovechar el día y me dicen esto.
En
Zara sólo les quedaba... 1 vaquero. Además en una única talla que no me
pude subir más allá de las rodillas, por supuesto. ¿Cómo me tenía que
venir en cuanto engordase un poco?
Preguntamos en otras tiendas pero en
ninguna había línea premamá, hasta que una dependienta nos aconsejó
preguntar en la tienda de Benetton, que tiene sólo ropa de bebé y niño, y
a lo mejor... Y tuvimos suerte. No es que hubiese mucho surtido pero
después del día que llevábamos me probé casi todo lo que tenían y acabé
comprándome un vaquero, unas mallas, un pantalón negro, un vestido, varias camistetas y un jersey.
Y
ese pantalón negro es el que he estrenado hoy. Hace bastante frío estos
días y cada mañana me levanto pensando en qué ponerme para ir cómoda y
no pasar frío. Hoy me ha venido el pantalón a la cabeza y como es muy
elástico y no tiene la típica cintura premamá que se nota enseguida, con
un jersey larguito encima voy súper bien. Es un poco estilo pantalón de
montar a caballo, muy cómodo, y la verdad es que ya tengo barriguita.
Bueno, lo reconozco, ya tenía casi la misma antes de quedar embarazada,
pero antes no me gustaba nada y ahora estoy feliz de tenerla. Y no sé,
el llevar por primera vez una prenda de embarazada es como si me hiciera
creérmelo más, el embarazo, porque muchos días con todo el ajetreo del
trabajo y la rutina, y ahora que ya no tengo tantas náuseas, es como si
fuese todo un poco irreal, como si hubiese tenido un sueño en el que
estaba embarazada. Pero hoy no. Hoy voy ya con ropa premamá.